Diario OJO
Sicario 'Colombiano': "Así maté a Ezequiel Nolasco"
sicario colombiano demostró que necesitó pocos minutos para acabar con la vida del consejero regional
Volvió al lugar del
crimen. El presunto asesino del ex consejero regional de Áncash, Ezequiel
Nolasco, Cristian Joel Cruzate Pereda, mejor conocido como 'Colombiano' o
'Negrasho', confirmó ayer frente a la Policía y representantes del Ministerio
Público que necesitó unos pocos minutos para asesinar al funcionario el pasado
14 de marzo.
Fuentes policiales
revelaron que el detenido, quien ha asegurado que recibió diez mil soles para
cometer el crimen, demostró cómo actuó en el asesinato, lo que está registrado
en su manifestación policial.
El crimen provocó la
detención del presidente regional de Áncash, César Álvarez, y varios de sus
allegados. En medio de un gran resguardo policial y vistiendo un chaleco antibalas,
'Colombiano' abandonó a las diez y media de la mañana el calabozo que ocupa
desde hace más de diez días en la Dirincri para ser conducido a la sede de
Dirección de la Policía Aérea (Dipa), donde lo esperaba el helicóptero que lo
trasladó a Huacho, ante el temor de que se produzca un atentado contra su vida
en el caso sea llevado por vía terrestre.
La aeronave aterrizó en
el estadio del distrito de Santa María. Con él arribaron unos quince efectivos
policiales de la División de Homicidios de la Dirincri de Lima, encabezados por
el general PNP José Lavalle Santa Cruz. Protegido por francotiradores Cuidado
por francotiradores de la SUAT y efectivos policiales de la zona, 'Colombiano'
fue llevado primero al local de la Divincri -Huacho y recién a las dos de la
tarde al bar Centenario donde perpetró el asesinato, ubicado en la primera
cuadra de la avenida del mismo nombre.
En ese lugar volvió a
recordar lo que pasó la noche del 14 de marzo, minutos antes de las doce de la
noche: 'Esa noche 'Chino Malca' reconoció a un tal Nolasco y me dijo que le
hiciera la marca (no perderlo de vista), el señor
Luego continuó: 'Ya
previamente el 'Chino Malca' me había dicho que Nolasco era el más chato,
vestía una camisa blanca y miraba hacia afuera. Ingresé con el arma en la mano
derecha, llegué a la puerta del restaurante, le apunté y disparé. Al primer
disparo, los otros se tiran al suelo. Le disparé dos veces de frente y dos
aproximadamente en el cuerpo. Luego salí corriendo, subí a la mototaxi y nos
fuimos al centro de Huacho'.
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